Observación Interior

Siempre nos ocupamos de nuestra salud física: visitamos a nuestro médico, al odontólogo, vamos al gimnasio y ¿cuándo nos ocupamos de nuestra salud emocional?

Pareciera que al no ser tangible, nuestro equilibrio emocional queda librado al azahar, al destino, a las circunstancias de la vida, sintiéndonos totalmente despojados de la responsabilidad que ello conlleva. ¿Te sentís responsable de tu bienestar emocional o es algo que simplemente sucede?

¿En tu escala de valores, qué lugar ocupa tu bienestar emocional? ¿En el caso que ocupe los primeros lugares, algo tan significativo lo dejarías librado a la suerte? ¿Crees que puedes hacer algo o alguien puede ayudarte? ¿De qué manera?

Si comienzas a observar lo que piensas de ti, de las personas que te rodean y de tu entorno, con paciencia, alguna respuesta seguro que encontrarás.

Mindfulness es una herramienta muy poderosa para la observación interior. Generalmente nos quedamos atrapados en las fantasías, ensoñaciones, anhelos; donde no podemos observar cómo se suceden los pensamientos, como si un pensamiento estuviera atado al siguiente. ¿Tomaste conciencia de esto en alguna oportunidad?

Los pensamientos son contenidos mentales, no realidades en sí mismos; si entrenamos nuestra atención podemos distinguir la aparición y desaparición de un pensamiento. De esta manera logramos la ralentización de los procesos mentales. Esa es la actitud de estar presente, de salir del piloto automático con el que vivimos en nuestra demandante vida cotidiana.

Mindfulness te entrena en la presencia en el presente, para no perdernos en los sentimientos o los pensamientos.

Desafio

Tome unos minutos para leer todo y después realice la actividad al final del articulo.

Te propongo que te tomes unos minutos para realizar una observación interior: desconecta tu móvil y asegúrate de no recibir interrupciones durante este tiempo; cierra los ojos y siente cómo tu cuerpo se mueve sutilmente con la respiración, sólo eso: nada más que hacer ni ningún lugar a donde ir.

Observa la pantalla de la mente… seguramente aparecerán palabras o imágenes, de la actualidad, pasadas o de lo que deseas, sólo OBSERVA, no las califiques. Veras verlas pasar una tras otra, te habías dado cuenta que tenías tantas cosas en la mente???. Pues así somos, todo ello impacta en nuestras emociones.

No hagas nada con ello, sólo vuelve a centrarte en la sutileza de la respiración por unos minutos más …. Uno minutos más…. Y siente qué sucede….

Escrito por: Psic. Eve Cortapello

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